El fabricante alemán de aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL), Lilium, ha anunciado su declaración en concurso de acreedores tras no lograr asegurar la financiación necesaria para continuar sus operaciones. Esta situación marca la segunda insolvencia de la empresa en un período de cuatro meses, reflejando las dificultades financieras que enfrenta la industria emergente de taxis aéreos.
En octubre de 2024, Lilium ya había solicitado un proceso de insolvencia después de que un consorcio de inversores, conocido como Mobile Uplift Corporation (MUC), no cumpliera con la promesa de una inversión de 200 millones de euros destinada a rescatar la compañía. Esta falta de financiación llevó al despido de 750 empleados justo antes de las festividades navideñas. Posteriormente, en febrero de 2025, la situación se agravó cuando los empleados, que llevaban casi dos meses sin recibir sus salarios, recurrieron a una campaña de recaudación de fondos en línea para obtener apoyo financiero.
La empresa había solicitado una garantía para un préstamo de 100 millones de euros al gobierno alemán, pero esta petición fue denegada. Negociaciones similares con el gobierno de Baviera tampoco tuvieron éxito. Como resultado, las filiales de Lilium, Lilium GmbH y Lilium eAircraft GmbH, presentaron solicitudes de insolvencia, lo que provocó una caída del 57% en el valor de las acciones de la empresa en el mercado estadounidense, situándose en 23 centavos por acción.

Fundada en 2015, Lilium se destacó por su innovador diseño de aeronave eVTOL, el Lilium Jet, concebido para transportar entre cuatro y seis pasajeros a distancias de aproximadamente 175 kilómetros a una velocidad de 250 km/h. A pesar de contar con una cartera de pedidos confirmados y reservas que sumaban 108 unidades, además de opciones sobre 82 aparatos y acuerdos preliminares por más de 600 unidades, la empresa no pudo superar los desafíos financieros y regulatorios inherentes al sector.
La situación de Lilium pone de manifiesto las dificultades financieras que enfrentan las empresas del sector eVTOL. A pesar de inversiones significativas en la industria, que ascienden a aproximadamente 13.000 millones de dólares desde 2019, la obtención de beneficios sigue siendo esquiva debido a los elevados costos asociados con el establecimiento de operaciones y la obtención de certificaciones. Analistas predicen que los primeros vuelos comerciales de eVTOL certificados podrían lanzarse a finales de 2026 o principios de 2027 en Estados Unidos, aunque persisten obstáculos financieros y regulatorios considerables.
La caída de Lilium subraya la necesidad de modelos de negocio sostenibles y el respaldo financiero adecuado para que la industria de taxis aéreos eléctricos pueda prosperar en el futuro cercano.